
El plenario provincial de delegados de salud de ASSPUR rechazó la pauta salarial propuesta por el Gobierno en la Mesa de la Función Pública y convocó a un nuevo paro general.
La protesta tendrá lugar el próximo jueves, coincidiendo con una medida nacional.
“La nueva rebaja salarial que el Gobierno impuso a los trabajadores en la mesa de la función pública, en conjunto con los gremios oficialistas (ATE y UPCN), se da con una pauta salarial al 31 de diciembre del 2022 de apenas un 70% (aplicados sobre salarios de Febrero con montos no acumulativos) contra una inflación proyectada de 110 % para el presente año (fuente BCRA)”, exclamaron.
Añadieron que “el 12% restante de la pauta (completando un 82%) será abonado recién en febrero de 2023. Incluso al percibir recién el año que viene ese porcentaje, no impactará en la segunda cuota del medio aguinaldo, lo que suma al ajuste impuesto”.
Interpretaron que “esto constituye una nueva caída del salario real, pérdida del poder adquisitivo y disminución de la calidad de vida de nuestras familias”.
Afirmaron que “los salarios de los trabajadores de la salud de Río Negro quedaran 40 puntos porcentuales por debajo de la inflación al 31 de diciembre de 2022”.
En este contexto, el plenario dio voto unánime a la adhesión al Paro Nacional de Salud convocado por la FESPROSA para el próximo 17 de noviembre, ya que la medida “sintetiza y expresa el rechazo a las políticas de ajuste que se descargan sobre el salario de los trabajadores en todo el país”.
Denunciaron que “el Gobierno de Arabela Carreras una vez más aplica como variable de ajuste de las cuentas públicas, el salario de los trabajadores de la salud que por sexto año consecutivo pierden valor”.
“Sin olvidar que las reivindicaciones de fondo no han sido resueltas, los trabajadores de la salud nucleados en ASSPUR FESPROSA seguimos sin ser convocados a discutir salarios y condiciones de trabajo. Sufriendo persecuciones y maltrato por ejercer nuestros derechos sindicales, como es el caso de los trabajadores/as del Hospital de Campo Grande. Sin olvidar que por falta de personal fruto de las políticas de ajuste en salud, se están negando licencias reglamentarias adeudadas, que se han profundizado la precariedad laboral y las violencias, que la salud pública está en continua decadencia por la ausencia de políticas sanitarias, y que la liquidación de salario no registrado trepó hasta alcanzar casi el 70 %, constituyendo una estafa a todo el sistema público”.